Es inevitable. Cuando hablamos de rentrée estamos sufriendo por la vuelta a la rutina. Es el síndrome postvacacional. Y aunque es difícil de medir, sí que podemos afirmar que la falta de energía y motivación, apatía y cansancio y la falta de concentración son algunos de sus síntomas más comunes. Y, para tu tranquilidad, según datos de Adecco lo sufre (o lo sufrirá) un 30% de los trabajadores.
Sin embargo, también es el mejor momento para poner el contador a cero. El curso no solo empieza para los más pequeños y, quizá, sea una buena oportunidad para retomar nuestros hábitos y plantearnos otros nuevos. ¿Los más comunes? Ir al gimnasio, optimizar mejor las horas de trabajo para disponer de más tiempo libre, replantear la relación con la pareja, hacer dieta… Y el motivo es que, al parar en vacaciones, tenemos más tiempo para observarnos, ver lo mejor y lo peor en nuestras vidas, y hacer por cambiar lo que no nos gusta. Por eso lo más importante, además de saber qué es lo que queremos conseguir, es saber cómo podemos conseguirlo y qué nos impide lograrlo.
“Nuestra meta ha de ser alcanzable – y ser conscientes del beneficio que nos aportará. Porque esa motivación será lo que nos haga mantenernos firmes y perseverar”, nos cuenta Ludovic Dujardin, co-fundador de Petit BamBou. Y para no abandonar en el camino: “Nos ayudará meditar de forma regular para ser conscientes de esos pequeños cambios y no dejarnos llevar”.
Alcanza tus objetivos
Ananda Ceballos, Doctora en Filosofía y Psicóloga, además de profesora de yoga y meditación y colaboradora de la app de meditación Petit BamBou, nos cuenta que “las vacaciones nos ayudan a “vaciarnos” de todo lo que nos pesa y nos oprime”. Por ello se trata de un periodo idóneo para tomar consciencia de lo que nos gustaría cambiar en nuestras vidas.
“Nuestras metas nos llevan de forma natural a mirar hacia el futuro pero es muy útil empezar mirando al pasado: ¿qué metas me propuse el año pasado después de las vacaciones? Algunas quizás las he alcanzado, otras quizás no. Si se trata de algo que no he conseguido, ¿por qué abandoné mi objetivo”, nos plantea Ananda. Porque los grandes cambios aparecen al final de muchas transformaciones pequeñas y silenciosas, estos son los consejos que nos da para conseguir hacer (y no abandonar) todo lo que nos propongamos en la rentrée:
1/ Asegúrate de que tus objetivos son realmente tuyos. Y no algo que otra persona desea para ti. Asegúrate de que los objetivos que te marcas son verdaderamente relevantes para ti, que lo deseas profunda y sinceramente independientemente de lo que piensen los demás.
2/ Ancla tus objetivos en la realidad. Aquello que sabes que puedes hacer o llegar a hacer, no dejes volar la imaginación hacia un ideal de perfección inalcanzable.
3/ Establece tus objetivos de manera positiva. Nuestro inconsciente no retiene las frases negativas, si formulamos un objetivo como “NO fumar” nuestro inconsciente escuchará “Fumar”. Da un giro lingüístico a tu frase, ya veras como te sorprende la eficacia de ese pequeño cambio de orientación.
4/ Ponte objetivos a corto plazo Y a largo plazo, ambos son importantes. Si quieres perder 20kg empieza pensando: “quiero perder 4 kg” a corto plazo, y el resto en un periodo de tres meses, por ejemplo.
5/ Encuentra una persona que te anime, te apoye y te aliente. Porque si contamos con el apoyo de un compañero, será más fácil continuar y no dejarse llevar.
6/ Recompénsate de vez en cuando. No todo ha de ser sacrificio, también debemos auto-premiarnos cuando alcancemos una de nuestras metas.
7/ Aprende a identificar la voz de tu “crítico interior”. Será quien intente sabotear tus esfuerzos constantemente. Frases como "no lo vas a conseguir, "eres un inútil" o “lo vas a echar todo a perder” vienen de esa sub-personalidad que bloquea nuestra creatividad, nuestra alegría y limita nuestra energía vital.
Gestiona tu tiempo
Los españoles somos los europeos que más horas pasamos en el trabajo, pero no los más productivos. ¿Qué nos pasa? Un informe de Workmeter desvela que solo un 45% de la jornada laboral en España es productiva y que un 35% del tiempo se destina a tareas necesarias, pero que no aportan rentabilidad. El 20% restante son horas no productivas en las que se produce una pérdida neta de tiempo, recursos y dinero. ¿Y en qué perdemos el tiempo? El 44,7% de esas horas las dedicamos a mirar internet y un 23,4% a hablar con los compañeros. No solo eso, un 6,8% se pierden en gestiones personales que no podemos hacer fuera del horario laboral. Al menos, solo se contabiliza un 1% de empleados que llegan tarde.
Es la radiografía del tiempo perdido, en el trabajo. Pero la clave es que no somos conscientes de nuestro propio tiempo. Porque cuando hablamos de tiempo dedicado a nosotros mismos, el panorama no es mucho mejor ya que según el informe de tendencias digitales y de redes sociales de We Are Social lanzado en 2019, dedicamos 1 hora y 39 minutos a nuestros perfiles y pasamos una media de 3 horas delante de la televisión, ya sea tradicional, en streaming o a la carta.
“Durante el año, tenemos tendencia a olvidar lo que nos gusta hacer. Por eso es importante recordar lo que nos hace bien, seguir el hilo de Ariadna de la vida y no perdernos en el laberinto del trabajo y las obligaciones”, nos cuenta Ananda Ceballos. Y añade estos pequeños consejos para manejar mejor el tiempo del que disponemos y poder realizar aquellas actividades con las que conseguimos experiencias placenteras:
- Transformar los pequeños placeres en nuevos hábitos: si las vacaciones son la ocasión de descubrir nuevas formas de funcionar (practicar un deporte, alimentarse de otra manera o vivir más en el instante presente), una vez que las vacaciones se terminen, podemos seguir cultivando esos pequeños placeres que han hecho de las vacaciones un momento especial. Así, esos comportamientos podrán transformarse en nuestros nuevos hábitos.
- Haz un “retro-planning” de cada objetivo: definir qué ha de estar terminado para final de mes, final de la semana o para mañana… Fraccionando así las tareas aligeramos el peso del trabajo.
- Evita la procastinación: Aristóteles decía que “comenzar es ya mas de la mitad de una cosa”. Si dejamos algo para mañana, corremos el riesgo de dejarnos paralizar por emociones negativas como la culpabilidad, la frustración o la pérdida de auto-estima.
Programa de Gestión del Tiempo de Petit BamBou
Dirigido a todos los meditadores, ya sean principiantes o avanzados, el programa de Gestión del Tiempo de la app de meditación Petit BamBou ha sido diseñado por Diane Ballonad Rolland, consultora y formadora de organización y gestión del tiempo, y coach profesional certificada. ¿Su objetivo? Ayudarte a apropiarte de tu tiempo y a (re)encontrar el equilibrio a pesar de estar desbordados, cansados o estresados por la vida cotidiana.
En total, 18 sesiones de 15 minutos pensadas para volver a situarte en el centro de tus prioridades y mejorar tu relación con el tiempo, ya que ésta define una gran parte de nuestra calidad de vida y nuestra felicidad.
Petit BamBou es la App de meditación Mindfulness 100% en español con la que ya meditan más de 3 millones de personas. Su método sencillo y eficaz la convierte en la mejor opción para aquellos que quieran empezar a meditar y para los que ya llevan tiempo meditando. Más de 350 meditaciones entre 10 y 20 minutos sobre distintas temáticas: estrés, ansiedad, sueño relaciones, trabajo, maternidad…, y videos explicativos que guían a los usuarios a través de los principios clave de la meditación. Amplio contenido gratuito con el que iniciarse.
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