www.enpozuelo.es

Obesidad abdominal, un riesgo para la salud y un problema para la autoestima

miércoles 11 de septiembre de 2019, 11:02h
Obesidad abdominal, un riesgo para la salud y un problema para la autoestima
Ampliar
De nuevo septiembre. Otra vez esos kilos veraniegos de más que, según la morfología de cada uno, asoman, bien en la zona glútea, los muslos y los brazos, bien en la cintura y el abdomen.

En este segundo supuesto, y si hacemos caso a las advertencias de la Fundación Española del Corazón, cuando la cinta métrica sobre el abdomen marque más de 88 centímetros en el caso de la mujer y de 102 en el del hombre entramos en zona de riesgo. Deberíamos empezar entonces a preocuparnos en serio de la posibilidad de sufrir un accidente cardiovascular o de padecer hipertensión arterial.

Llegado este punto existe cierta confusión en torno a las posibles soluciones, que siempre comienzan por modificar el estilo de vida, por lo que respecta a la alimentación y al deporte. La dieta equilibrada y el abandono del sedentarismo son el punto de partida para comenzar a perder ese peso.

Pero no hablamos sólo de riesgos, también de autoestima y complejos físicos, por lo que muchas personas acuden al cirujano estético en busca de una solución rápida. La pregunta es sí se trata la adecuada. Jesús Benito Ruiz, presidente de la Asociación Española de Cirugía Estética y Plástica, explica que depende de la cantidad de grasa depositada y de los lugares en los que se encuentre.

Si la grasa está depositada bajo la piel, la llamada grasa extraabdominal, se puede tratar con el bisturí. Si, por el contrario, se encuentra rodeando a los órganos internos, grasa intraabdominal, la solución pasa por el control nutricional y el ejercicio. Aquí, reconoce el doctor, poco puede hacerse en el quirófano.

El procedimiento habitual para conocer la naturaleza del problema es una ecografía que determinará el grado de grasa dentro del abdomen (peritoneo, retroperitoneal y grasa hepática). Los resultados, explica Benito Ruiz, serán evaluados posteriormente por el endocrinólogo o el nutricionista.

Abdominoplastia o liposucción

Desde AECEP se recuerda que cuando el remedio es quirúrgico se presentan diferentes alternativas, dos procedimientos fundamentales: la liposucción y la abdominoplastia.

La primera operación consiste en la extracción de los depósitos grasos mediante un sistema de cánulas de diversos calibres que primero remueven las células grasas, para proceder después a su aspirado.

La liposucción es una de las operaciones más demandas en todo el mundo, tanto en mujeres como en hombres.

Más compleja es la abdominoplastia, ya que no sólo elimina la grasa, sino que se ocupa de la retracción de la piel que sobra. Se realiza “en aquellos casos en los que hay flacidez y riesgo elevado de que la liposucción deje irregularidades en la piel. La liposucción depende enteramente de la capacidad de retracción cutánea así que si hay exceso de piel es mejor la abdominoplastia “

Son palabras del presidente de AECEP que matiza que el grado de flacidez depende también en gran medida de la edad del paciente. Por otro lado, reconoce que es una intervención que ofrece unos resultados especialmente buenos en el llamado mommymakeover, la recuperación tras el parto, porque “permite una restitución completa de la pared abdominal, lo que incluye la musculatura, que ha sido afectada por el embarazo”

Obesidad mórbida

Cuando el sobrepeso y la obesidad alcanzan proporciones mórbidas es otro tipo de cirugía, la bariátrica la encargada de ayudar al paciente. La estética “no es una herramienta para adelgazar, pero sí una motivación para perder peso”, matiza Jesús Benito.

El paciente operado de reducción de estómago debe esperar al menos seis meses con un peso estable para ponerse en manos de un cirujano estético. Se procede entonces a la dermolipectomía, la retirada de la piel que sobra.

Por último, el doctor recuerda que debe existir el compromiso del paciente por seguir después un control de peso, “sin obsesionarse”. “No sería comprensible pasar por el quirófano sin tener la voluntad de cambiar los hábitos alimenticios”.

Jesús Benito Ruiz es presidente de AECEP cirujanos.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios