“Es un tratamiento que asegura tanto la desaparición de la grasa como que no haya flacidez posterior, todo sin baja, sin marcas, y sin apenas molestias. Es ideal para eliminar la grasa de zonas localizadas”, explica la Dra. Rosso (Centro Médico Lajo Plaza).
Protocolo.
- La semana previa al tratamiento no conviene beber alcohol o tomar medicamentos antiinflamatorios.
- Una vez en la consulta, se aplica una crema anestésica local y se procede a dibujar las zonas que van a ser tratadas en forma de malla o rejilla.
- El producto se reparte por la zona a tratar a través de microinyecciones.
- La sesión tiene una duración máxima de 30 minutos.
Efectos secundarios.
El más común es la hinchazón de la zona tratada. “Durante dos o tres días la zona puede estar aproximadamente un 15% más hinchada”, explica la Dra. Rosso, “pero esa hinchazón no sólo no es mala, sino que es bienvenida, porque es la responsable de esa retracción de la piel”. Puede durar hasta 72 horas e ir acompañada de hematomas o enrojecimiento. Solo en algunos casos hay adormecimiento de la zona y una ligera pérdida de sensibilidad que desaparecería progresivamente.
Sesiones.
Se necesitan entre dos y cuatro sesiones, y hay que espaciarlas un mínimo de un mes.
Resultados.
Los resultados definitivos se comienzan a apreciar pasadas un par de semanas. Son espectaculares en personas que habiendo intentado reducir grasa a través de la dieta o el ejercicio no han conseguido eliminarla de ahí. Debido a la acción del fármaco, no hay riesgo de flacidez y los tejidos se vuelven a reposicionar de forma natural dejando una espalda muy bonita.
Precio: a partir de 950 euros.