El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha visitado ayer las obras de dos importantes centros de interés deportivo dentro del proyecto Madrid Río: las instalaciones de pádel en el Puente de Praga y el Circuito BMX, en uno de los lazos del llamado Nudo Sur. El complejo de BMX abrirá sus puertas la próxima primavera.
Después del verano los madrileños disfrutarán del rocódromo construido en el entorno del Puente de Toledo, que incluye una escuela de escalada gestionada por la Federación Madrileña de Montaña.
Gallardón subrayó la mejora de la movilidad y de la sostenibilidad de toda la ciudad gracias a los proyectos de Calle 30, ejecutado la pasada Legislatura, y de Madrid Río, además de la recuperación de espacios para el deporte antes invadidos por el tráfico.
"En un espacio que el tráfico y el asfalto convertía antes en un terreno de nadie, hoy Madrid cuenta con 9.286 metros cuadrados de instalaciones deportivas que albergan siete pistas de pádel, una de tenis, vestuarios e instalaciones auxiliares, y en los que además se han plantado 99 árboles".
Ciclismo extremo
A continuación recorrió el futuro Circuito BMX, para un deporte olímpico también conocido como ciclismo extremo, que cuenta con numerosos aficionados. Su coste asciende a 2,5 millones de euros, financiados con cargo al Fondo Estatal de Inversión Local, y favorecerá tanto la práctica como el aprendizaje, y la celebración en Madrid de importantes campeonatos de esta disciplina. El equipamiento ocupa uno de los lazos del llamado Nudo Sur, en el límite del proyecto Madrid Río, e incorpora las más avanzadas tecnologías tanto para favorecer la sostenibilidad y la eficiencia energética como para el control de tiempos en las competiciones que se celebren sobre su trazado, que alcanza los 7.184 metros cuadrados. En su entorno se han plantado 1.089 árboles y se han creado más de 25.000 metros cuadrado de praderas.
Eje medioambiental
La radical transformación urbana es el resultado de la combinación de dos proyectos: Calle 30, ejecutado la pasada legislatura, y Madrid Río, que abarca una superficie de 6,9 millones de metros cuadrados y que ya se ofrece a todos los ciudadanos como un gran eje medioambiental, lúdico, cultural y deportivo.
Los 8.360 árboles plantados en el Salón de Pinos, el gran espacio surgido en la Explanada del puente del Rey, junto a los 148.000 metros cuadrados destinados a la creación en Matadero Madrid o los recuperados puentes del Rey, Segovia y Toledo, son algunas de las aportaciones de Madrid Río al conjunto de la ciudad.
Además de ser en sí mismo un nuevo paseo arbolado peatonal y ciclista, en su ámbito de influencia existen grandes infraestructuras deportivas como la Caja Mágica, el Club de Campo o el Anillo Verde Ciclista, además de estar perfectamente comunicado con la Casa de Campo y, gracias a las pasarelas que se están construyendo, con el Parque Lineal de Manzanares. En total son más de 227.000 metros cuadrados los que Madrid Río destina a instalaciones deportivas, ya sean rehabilitadas o de nueva construcción.
Rocódromo
Ligado a la oferta deportiva de Madrid Río se incluyen actuaciones que completan la oferta deportiva vinculada a Madrid Río. Después del verano abrirá sus puertas el rocódromo construido en el entorno del Puente de Toledo, que incluye una escuela de escalada gestionada por la Federación Madrileña de Montaña. Del mismo modo, tanto el patinaje como el skate contarán con pistas específicas en el renovado parque de Arganzuela, donde también se construirán dos campos de fútbol 7 y uno de fútbol 11. Los aficionados al remo podrán practicar en el propio río, entre las presas 8 y 9, gracias a la construcción de un embarcadero. Por último, se abrirán otras 6 pistas de pádel en las cercanías del Puente del Rey y se crearán diversas zonas dotadas de aparatos biosaludables entre los puentes de Segovia y La Princesa.
Si (
No(