La Comunidad de Madrid aconseja tomar ciertas medidas de seguridad, tales como llevar un móvil con batería cargada para poder comunicarse en caso de extravío o consultar a un experto en micología antes de consumir las setas recogidas.
La Dirección General de Protección Ciudadana, atendiendo a experiencias de años anteriores en que han tenido que intervenir en búsquedas y rescates por este motivo, recuerda que cualquier persona perdida en el monte, debe llamar al teléfono de Emergencias de la Comunidad de Madrid 112, e indicar, antes que nada, la zona en la que se encuentra, ante un posible corte de comunicación.
Asimismo, recomiendan evitar salir al campo con condiciones meteorológicas adversas, para lo que es importante informarse antes de la previsión. Nunca se debe ir sólo, y antes de salir es conveniente informar a algún familiar de nuestra salida, así como de la hora prevista de vuelta. También es importante elegir las primeras horas del día para salir y evitar las últimas horas de la tarde.
Otras medidas aconsejables son hacer la planificación de una ruta, llevar consigo un mapa y una brújula, buscar puntos de referencia y localizar puntos elevados para observar los alrededores. En caso de pérdida, es preciso dirigirse hacia cualquier construcción, camino, carretera o río, siguiendo su curso hasta llegar a un lugar habitado.
Por último, se aconseja no consumir las setas recogidas sin consultar a un experto, organismo especializado o servicio dispuesto por las administraciones públicas para estos casos, para que examine el producto y certifiquen con seguridad que son comestibles.
Respeto del medio natural
Por su parte, el Cuerpo de Agentes Forestales de la Comunidad de Madrid recuerda que durante el desarrollo de esta actividad no debemos olvidarnos del respeto a la naturaleza. Así, aconsejan dejar los vehículos lo más alejados posible del medio natural, no intervenir en la vida animal ni vegetal con la recogida de especímenes, nidos, utilización de luces o sonidos y no hacer uso del fuego.
Asimismo, recomiendan coger sólo las setas que podamos consumir, en un estado de maduración razonable, utilizando cestos de mimbre para favorecer la esporación y avisar a los agentes forestales ante cualquier anomalía que se detecte.
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