Los entrenadores personales, en auge: agrupan el 55% de las solicitudes de servicios deportivos

La llegada del invierno y las bajas temperaturas, la lluvia y las escasas horas de sol que esta estación trae consigo, invitan a muchas personas a dejar de lado o limitar su actividad física habitual. Sin embargo, mantener la rutina deportiva durante estos meses es tan importante como en el resto del año, ya que practicar regularmente ejercicio implica numerosos beneficios como aliviar el estrés de las jornadas laborales, así como reducir el riesgo de depresión o irritabilidad que se acentúa con la llegada del frío, aumentar los niveles de energía, estimular el sistema inmunitario o ayudar a compensar el mayor suministro de calorías que habitualmente ingerimos en épocas navideñas.

Es por ello que, según un estudio elaborado por Prontopro.es, la plataforma que reúne la oferta y demanda de trabajo profesional, la alternativa de entrenadores personales y de entrenadores a domicilio ha cobrado una enorme popularidad durante los últimos meses, debido a que estos profesionales trabajan con rutinas personalizadas que permiten realizar los ejercicios más acordes a cada objetivo, lo que hará que se logren resultados en un menor periodo de tiempo.

El auge de estos servicios ha llevado a que, de acuerdo con este informe, la demanda de entrenadores personales, que prestan sus servicios de manera online y/o presencial, agrupe hasta el 55% de las solicitudes durante el año 2021; seguidos por los entrenadores a domicilio, que han abarcado el 45% de las mismas. Además, la búsqueda de estos profesionales ha ido incrementándose desde julio, siendo septiembre el mes en el que se han presentado un mayor número de requerimientos, con un repunte en la demanda del 29% con respecto al mes anterior.

Claves para mantener la actividad física en invierno

Con el fin de seguir cuidando nuestra salud y no limitar la actividad física durante los meses más frío del año, Prontopro ha consultado con diferentes expertos inscritos en el portal, aportando algunas recomendaciones al respecto:

1. Revisa el pronóstico del tiempo y promueve actividades cotidianas. La temperatura, el viento y la humedad, sumado a si se realiza actividad física al aire libre, son factores clave a la hora planificar un entrenamiento que permita cumplir con los objetivos en clima frío, ya que contribuirán a la elección de la vestimenta y el calzado más adecuado y del tipo de entrenamiento a desarrollar. Por otro lado, durante estos meses conviene incentivar ciertos hábitos cotidianos y saludables como caminar todo lo posible o subir y bajar escaleras, al ser actividades que también ayudan a mejorar nuestra salud cardiovascular, además de contribuir a quemar calorías o tonificar músculos.

2. Establece un horario para entrenar y mantén tu rutina diaria. Encontrar una hora del día en la que hacer ejercicio a diario puede llevar tiempo, pero también permite una mayor organización, así como mantener la motivación que a veces escasea durante esta época; por lo que la rutina física deberá establecerse en aquellas horas del día que conlleven menos interrupciones o impedimentos para cada uno. Asimismo, es importante evitar, en la medida de lo posible, hacer ejercicio en aquellas horas donde se registran las temperaturas más bajas (a primera hora de la mañana o muy tarde por la noche), con el fin de evitar enfermedades respiratorias o dolores de cabeza.

3. Cambia tu entorno. En ocasiones, la falta de interés por el deporte viene promovido por repetir de manera continua los mismos ejercicios, por lo que, llegados a este punto, cambiar el estilo de entrenamiento, o bien aumentar su intensidad, será imprescindible. Para mantener la motivación, los expertos recomiendan probar diferentes lugares nuevos, como por ejemplo parques donde se encuentren entrenando más personas o zonas donde respirar aire fresco.

4. Calienta antes de practicar deporte. El calentamiento previene posibles lesiones y predispone el cuerpo y la mente a hacer ejercicio y, por esta razón, será fundamental dedicarle unos 10 o 15 minutos y realizar un calentamiento cardiovascular y articular, haciendo hincapié en las zonas que más vayan a trabajarse ese día.

5. Busca asesoramiento en profesionales cualificados. Optar por la ayuda de un entrenador personal será una de las mejores vías para mantenerte activo, ya que estos profesionales determinarán una tabla específica a seguir en cada caso, supervisarán tus resultados y te ayudarán a conocer mejor tu cuerpo y, por ende, a ti mismo.