Esta edición es muy llamativa, debido a la ausencia de Novak Djokovic. El número uno del mundo, fue deportado de Australia por no estar vacunado, y no se le permitió participar y defender su título obtenido de manera consecutiva en los últimos 3 años.
A la ausencia de Djokovic, se le suman otros ganadores previos, como el caso de Roger Federer y Stanislas Wawrinka. De esa manera, habrá un nuevo campeón luego de 12 años. El panorama está abierto, y es una buena oportunidad para muchos tenistas.
El tenis es uno de los deportes más populares del mundo, especialmente cuando se juega un torneo de Grand Slam como el Abierto de Australia. Hay mucho movimiento durante esta competencia, con predicciones sobre cada partido y el campeón del torneo en los sitios de apuestas deportivas, donde puede implementar el codigo bono inkabet al realizar apuestas en los partidos.
Los candidatos a quedarse con la gloria
Con la ausencia de Djokovic como máximo favorito, se abrieron las puertas para otros jugadores. Algunos jugarán más aliviados, mientras que algunos pueden sentir la presión de ser favoritos.
El principal candidato es el ruso Daniil Medvédev. El número 2 del mundo ya conoce lo que es ganar un Gran Slam (lo consiguió el año pasado en el Us Open), y sabe manejar la presión sin problemas. Quedarse con el campeonato también podría significar ser el nuevo número del mundo. Sobre sus hombros está toda la responsabilidad.
Luego aparece Alexander Zverev. El alemán es el número 3 del mundo, pero tiene una deuda pendiente: coronarse en un Grand Slam. Zverev está maduro, y ha levantado trofeos importantes, como la medalla de oro de los JJOO y el Masters, por lo que tiene una gran oportunidad.
No se puede dejar de lado a Rafael Nadal. El español vuelve a las canchas luego de sufrir muchas lesiones en el último tiempo, pero siempre que Rafa participa, es candidato a ganar. Tiene el condimento adicional de poder transformarse en el máximo ganador de torneos de Grand Slam de todos los tiempos (está empatado en 20 junto a Djokovic y Federer).
La deportación de Djokovic generó una situación inesperada para muchos, y abrió las puertas a nuevos candidatos a ganar el Australian Open.
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