Hace años, se hizo famosa una publicación del actor Brays Efe aludiendo a las que presumían de sus paseos en barco, explicando -con humor- que él quería un amigo que tuviera uno para poder disfrutar del mismo plan. Pues bien, Instagram demuestra que hay más gente en barco de la que parece (yate, barco, barquita, lancha o patinete), pero no es oro todo lo que reluce, ya que estos paseos suelen tener un efecto secundario común: el mareo. “La inestabilidad del mar y el oleaje producen alteraciones en el sistema nervioso que pueden producir mareo e, incluso, la sensación de tener el estómago revuelto. Algo que también puede apreciarse cuando bajamos a puerto, ya que suele aparecer lo que se denomina “mal de tierra”, un desajuste al llevar horas en barco que nos agudiza ese malestar y altera, a veces, hasta a la estabilidad a la hora de andar”, explica Ana Yuste, directora técnica de la firma Aromatherapy Associates.
Esto les ocurre a los que viajan en barco, pero para los más mundanos, esta sensación es también más que habitual cuando se va en coche, sobre todo si el que conduce es ese amigo para el que acelerar y frenar bruscamente es su mejor pasatiempo. Más allá de la conocida Biodramina, existen alternativas más naturales, como este aceite que hemos descubierto: Support Lavender & Peppermint Bath & Shower Oil de la reconocida firma londinense Aromatherapy Associates. Su cuidado “blend” con aceites esenciales de gran calidad y de primera prensa contiene, como su nombre indica, lavanda y menta en una combinación que logra “aportar confort, relajar la sensación de indigestión, equilibrar la mente, aliviar el dolor de cabeza e incluso la insolación”, explica la experta de la firma.
Para aplicarlo, la experta recomienda aplicar unas gotas en el interior de la muñeca y en la nuca, como si de una fragancia se tratara, e intentar olerlo antes y durante el trayecto. “Además, se puede masajear un poco más en las manos y ponerlas en cuenco frente a la nariz para hacer tres fuertes inhalaciones. Sus aromas penetrarán mediante el olfato activando el sistema límbico y aportando esa sensación de bienestar”.
Un remedio -también- antimosquitos
Y es que este aceite no solo es bueno para estos viajes de día, también lo es para esos momentos de ocio nocturno en los que los mosquitos quieren hacer su agosto, y nunca mejor dicho. Y es que “a los mosquitos no les suelen gustar nada ciertos aromas que, por ello, consideramos como repelentes. Entre ellos está la conocida citrulina, pero también la lavanda y la menta”, aceites esenciales que tienen elevada presencia en Support Lavender & Peppermint Bath & Shower Oil. Para que funcione, lo mejor es “aplicar con las yemas de los dedos una pequeña cantidad en el interior de las muñecas, en la nuca, en la flexura interna de codos y rodillas y en los tobillos, lugares en los que los mosquitos suelen tener mayor tendencia a picar”, concluye Ana Yuste.
Support Lavender & Peppermint Bath & Shower Oil, 62€ en purenichelab.com
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