Decidir qué carrera estudiar tras realizar las Pruebas de Acceso a la Universidad no es algo sencillo. Sobre todo, porque son muchos los jóvenes que, bien a la mitad o al finalizar la titulación, comprueban que el trabajo para el que se han formado no concuerda con lo que tenían en mente. Por ello, desde los centros escolares se pide potenciar las prácticas antes de la Universidad para reducir el abandono o cambio de carrera.
El proyecto Work Experience ayuda a muchos estudiantes, entre otros aspectos, a elegir una carrera equivocada o a confirmar su vocación. Según explica Javier Soriano, orientador y organizador del programa de Everest School de Madrid donde impulsan desde hace años esta iniciativa, el objetivo es ofrecer a los alumnos de Bachillerato la oportunidad de vivir en primera persona la experiencia de un trabajo relacionado con su futuro profesional. Esto les permite tomar decisiones más informadas en un momento crucial para su orientación laboral.
Según la idea del proyecto, los alumnos de 1º de Bachillerato pasan tres días viviendo la experiencia laboral para la que se formarán próximamente. Ellos eligen el sector profesional y abandonan el entorno habitual de la escuela. De esta manera, además de potenciar habilidades prácticas, también descubren su vocación profesional.
Jaime Casanueva, antiguo alumno de Everest School, es uno de los muchos casos a los que estas prácticas anticipadas ayudaron. Tenía en mente ser arquitecto en 1º de Bachillerato. Pese a ello, las dudas siempre estaban presente. “Gracias a esas prácticas, entendí de verdad en qué consiste ser arquitecto y, sobre todo, me di cuenta de que eso era lo que quería hacer.
Me ayudó a tomar una decisión firme y con sentido. Conseguí entrar en la carrera de Arquitectura y no puedo estar más feliz”, explica.
El Work Experience desarrollado por Everest School ha permitido que diferentes jóvenes ‘vivan’ unos días en la energética Naturgy o en Management Solutions, entre otras compañías. “Es un orgullo colaborar con esta iniciativa y ayudar a los estudiantes a tomar una decisión más informada sobre qué estudios cursar y hacia dónde dirigir sus primeros pasos laborales.”, detalla Gerardo Montells, Head of Corporate Development de Naturgy.
“Durante estos días nos transmiten su ilusión, sus ganas de aprender, y también seguir cuestionándonos todo lo que hacemos y cómo lo hacemos”. Compartir con ellos estos días nos rejuvenece”, recalca Montells.
Cristina López, HR Director de Magamenet Solutions, “el programa aporta una experiencia práctica a los alumnos que puede resultar clarificadora a la hora de alinear sus intereses con las carreras universitarias existentes y sus posteriores salidas profesionales, al tiempo que permite conocer de primera mano los aspectos que más se valoran en una firma líder de servicios profesionales, no solo en términos académicos sino también en aspectos relacionados con la cultura corporativa y valores”.
Soriano reconoce que “es una tarea ardua y a veces complicada de organizar”, pero que “ayuda a crecer, a madurar, a sentirse importantes y valorados” a los estudiantes. Según relata, hay alumnos “con vocación sanitaria que al entrar en un quirófano se han caído al suelo” y otros que, una vez finalizados sus estudios universitarios, se han reencontrado con la empresa que les permitió hacer esta Work Experience.
Ante la incertidumbre laboral que viven los jóvenes hoy en día, y para hacer frente tanto al abandono universitario como al cambio de carrera o al fracaso en la salida al mercado, centros como Everest School potencian prácticas previas que ayuden a los estudiantes a escoger su futuro de una forma más clara.
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