La facialista Arancha Sevillano, al frente de la clínica médico-estética AC DermaStudio, asegura que uno de los momentos clave de esta patología cutánea es el verano, momento del año en el que el acné “simula desaparecer”, pero es precisamente un momento clave en el que hay que extremar el cuidado de estas pieles.
“Hablamos de un tema importante como es el acné, problema que afecta tanto a adultos como a jóvenes, por eso, nuestra primera recomendación es acudir a un buen especialista que nos sepa recomendar el mejor tratamiento”, afirma Arancha Sevillano.
Además, Arancha Sevillano recomienda cuidar al máximo la piel durante los meses más cálidos del año, ya que existe una falsa creencia de que el acné mejora durante los meses de verano porque el sol ayuda a su curación.
“En cierto modo podríamos pensar que es así, ya que la radiación ultravioleta es antiinflamatoria. De hecho, en AC DermaStudio, llevamos años tratando el acné con fototerapia medicalizada, puesto que además con el láser vascular aprovechamos las rojeces de las cicatrices para estimular la formación de colágeno. Por otra parte, la exposición al sol favorece el taponamiento folicular y, como decíamos, hace que la inflamación esté controlada durante los meses de verano”, declara.
El problema llega cuando termina el periodo estival: “Ese es el momento en el que llegan los rebrotes que, en la mayoría de los casos, empeoran notablemente”, declara.
¿Como podemos evitarlo? Arancha Sevillano nos da 3 claves para que el acné no empeore en verano.
1- Es clave utilizar fotoprotección todos los días, y que esta sea oil free o anticomedogénica.
2- Por otro lado, hay que sustituir los maquillajes pesados (que no dejan traspirar la piel) por fórmulas más fluidas.
3- Cada noche realizar una minuciosa limpieza de la piel.
En AC DermaStudio cuentan además con un protocolo de tratamiento 2 meses de duración, dividido en 3 fases:
1. Tratamiento domiciliario
Se seleccionan una serie de productos biológicos específicos para cada caso destinados a retirar la suciedad, como el sebo, sudor, descamación y cosméticos y a disminuir la infección bacteriana y limitar la formación de lesiones (cicatrices).
2. Tratamiento biológico en cabina
Se recomienda 1 sesión al mes en las que el profesional se centrará en tratamientos oxigenantes para aclarar, oxigenar, hidratar y reforzar el tejido logrando que adquiera mayor tolerancia a los productos antiacnéicos, dada la sensibilidad de este tipo de pieles.
3. Luz Pulsada Intensa (IPL)
La Luz Pulsada Intensa es gran enemigo del acné, además cuenta con la gran ventaja de que se puede utilizar durante todo el año. Su acción destruye las paredes de los vasos sanguíneos que alimentan las glándulas sebáceas, eliminando la Propionibacterium acnes, la principal bacteria causante del acné, de forma eficaz.
En 2 meses de tratamiento se consigue una reducción del 70% del acné activo.
Duración del tratamiento: desde 6 meses (dependiendo del grado del acné).
Precio: desde 500 €.
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