El alto índice de paro ha hecho que cada vez haya más gente que comience a trabajar como freelance. Pero, ¿qué pasa cuando decides comenzar tu vida profesional por cuenta ajena? Una de las gestiones más trabajosas es darse de alta en autónomos pero después también hacer las declaraciones trimestrales de Hacienda, llevar la contabilidad… Es decir, un largo etcétera que aterra a la mayoría de los autónomos.
La buena noticia para esto es que, a día de hoy, hay empresas de asesoría online como Xolo, que te hacen la vida mucho más fácil y por muy poco dinero. Sin salir de casa y de una forma ágil y eficaz.
Si éste es tu caso y estás pensando en comenzar una nueva andadura pero no quieres gastarte mucho dinero, probablemente se te pase por la cabeza realizar tú todos los trámites. Y, obviamente, es posible, pero el tiempo que te va a quitar de hacer tu trabajo al final va a ser dinero que vas a perder. En Hacienda, por ejemplo, los plazos no perdonan. Y si te toca presentar la documentación trimestral de IVA e IRPF justo al mismo tiempo que tienes que realizar un quizás te veas con el agua al cuello y agobiado para entregarlo a tiempo. Y lo peor de todo es que si se te pasan los plazos, aún tendrás que llevar a cabo más gestiones y papeleos.
Trámites necesarios para empezar como autónomo
Antes de empezar a trabajar de freelance, es fundamental realizar una serie de trámites ante diversos organismos públicos. Si quieres llevar a cabo todas las gestiones por tu cuenta tendrás que tener una firma o certificado digital para poder así todas las gestiones de manera online. Desde el pasado 1 de octubre, todos los autónomos están obligados a gestionar por vía electrónica los trámites relacionados con la afiliación, la cotización y la recaudación de cuotas. Además, deberás entrar en la sede electrónica para recibir las notificaciones y comunicaciones de la Tesorería General de la Seguridad Social
Después, tienes que acudir a la Tesorería General de la Seguridad Social para solicitar tu número de afiliación a la Seguridad Social. Si ya has trabajado anteriormente, entonces deberás acudir directamente a darte de alta como autónomo en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos.
Si tienes una empresa, también tendrás que solicitar un número para su identificación y control de sus obligaciones, el Código de Cuenta de Cotización.
Cuando te estés inscribiendo, deberás hacer constar la entidad gestora o mutua que quieres utilizar para cubrir el riesgo por enfermedad profesional y accidente de trabajo. Desde 2007, todos los autónomos tienen la obligación de cubrir estas contingencias, además de la incapacidad temporal, con una mutua.
La siguiente parada es la Agencia Tributaria para darse de alta en el Censo de Empresarios. Con la información solicitada allí, gestionarás después los impuestos que tendrás que pagar (modelo 036 y modelo 307).
Cuando acabes la inscripción toca el momento de acudir al centro de trabajo de la Consejería de Trabajo de tu comunidad para comunicar la apertura del negocio. Además, deberás solicitar las licencias pertinentes en función del tipo de actividad que vayas a desarrollar y de la Comunidad Autónoma en la que vayas a desarrollar el negocio.
Gestiones rutinarias
Una vez que hayas realizado todos los trámites para trabajar con todos los papeles en regla, es el momento de comenzar a ejercer tu profesión, pero con ello no se acaban los papeles. Cada vez que tengas un cliente, deberás realizar la factura en que deben aparecer ciertos datos obligatoriamente para que así se pueda efectuar el pago.
Además, trimestralmente hay que declarar los ingresos y gastos que has generado, una labor especialmente complicada si no quieres que Hacienda encuentre algún error. Gracias a las nuevas asesorías online como Xolo evitarás errores fiscales gracias a su plataforma intuitiva. En el improbable caso de que hubiera un problema con tus impuestos, ellos serán responsables si el error es suyo. Tu información fiscal estará constantemente actualizada en función de tus ingresos y gastos, para que puedas prever cuánto dinero tendrás que pagar de impuestos cada trimestre. Así que, no lo dudes ni un minuto, y delega los trámites económicos en una empresa especializada y evitar así infinidad de problemas.
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