El cuello es una de las zonas más olvidadas en nuestra rutina beauty. Sin embargo, es la primera en evidenciar el paso del tiempo en forma de arrugas, flacidez, pérdida de firmeza o exceso de grasa. Además de los pasos de skincare de limpieza, hidratación y protección solar, hay protocolos específicos que ayudan a mantener su juventud y evitar, así, el paso del tiempo.
¿Por qué se produce un envejecimiento cervical?
La piel del cuello es muy fina, delicada y frágil y es por eso por lo que delata el paso del tiempo prematuramente. De hecho, posee menos glándulas sebáceas que otras zonas y está expuesto a factores ambientales provocando manchas, pérdida de firmeza y arrugas. En definitiva, un envejecimiento prematuro que, si no cuidamos, se evidenciará antes que el resto del cuerpo.
La toma excesiva de sol sin protección de amplio espectro provoca una pérdida significativa de la firmeza de los tejidos. Esto provocada la llamada (y temida) flacidez. Eso se traduce en un exceso de piel en el cuello propiamente dicho o por una flacidez que viene del rostro y se acumula en el cuello. Además, el paso del tiempo afina la dermis y deteriora la epidermis. Esto puede ser causado por el propio paso del tiempo, pero se puede ver acusado por el consumo de tabaco, la exposición solar y una sequedad excesiva por una mala rutina facial ya que, el cuello, deberíamos tratarlo como una prolongación del rostro.
¿Qué tipos de arrugas existen en el envejecimiento cervival?
“En el envejecimiento cervical existen dos tipos de líneas. Por un lado, están las líneas verticales, que se deben a la flacidez de la piel o a la caída del músculo platisma. Por otro lado, están las líneas horizontales, también conocidas como collarete de venus, y se deben a un adelgazamiento de la piel que, normalmente, va en concordancia con un hundimiento del músculo platisma”, cuenta la Dra. Pérez Sevilla.
¿Cómo se trata el envejecimiento cervical?
Por un lado, las líneas verticales se tratan con lifting, con radiofrecuencia, ácido hialurónico o láser. Por su parte, las líneas horizontales las trataremos con láser y con relleno de ácido hialurónico.
Los rellenos con AH, además de corregir las arrugas, aportan un extra de hidratación para aquellas pieles que hayan perdido tersura y estén más envejecidas. Además, es un tratamiento muy rápido y donde los resultados se visualizan de una manera inmediata, aunque se incrementan con el paso del tiempo. Este tratamiento puede llegar a durar hasta 2 años. ¿Los motivos? Aunque el ácido hialurónico se reabsorba, el efecto correctivo dura más ya que hemos regenerado colágeno y el propio ácido hialurónico natural de la piel.
Por su parte, el láser CO2 es ideal para eliminar el envejecimiento cervical. Se trata de un sistema de luz que interactúa con la piel, eliminando sus capas más superficiales para su renovación (epidermis) y contrayendo y regenerando las capas profundas (dermis) para tensarla. Se puede realizar en una sola sesión o realizar varias con menos intensidad. En caso de realizarse en una sesión, la piel quedará marrón durante 6-7 días. Después, la piel comenzará a descamarse y quedará roja durante, aproximadamente, un mes. Se puede camuflar con maquillaje sin problema durante todo ese mes. El resultado se verá inmediatamente después de la descamación, aunque se intensificarán con el paso del tiempo.
Por último, el lifting es ideal para combatir la flacidez y las arrugas cervicales ya que hay que tensar la piel.