El objetivo es alcanzar en esta semana las 7.500 bolsas de sangre total entre todos los puntos de donación y paliar así el descenso en las donaciones durante el verano. Esta cantidad recuperaría los niveles de reserva, que actualmente se encuentran en un 55%, y permitiría afrontar el otoño con cierta tranquilidad y dar respuesta diaria a la demanda hospitalaria.
Para cubrir las necesidades de los hospitales madrileños, en una situación normal hacen falta 900 bolsas de sangre diarias. Sin embargo, la media en verano se ha reducido hasta las 500. Concretamente, entre junio y agosto se extrajeron 50.899, un 7% menos que durante el mismo periodo del año anterior.
Durante esta semana, por tanto, quienes quieran unirse solidariamente a este macromaratón podrán hacerlo, en Madrid capital, en el Hospital La Paz, 12 de Octubre, La Princesa, Ramón y Cajal, Gregorio Marañón, Clínico San Carlos, Fundación Jiménez Díaz y Niño Jesús.
Además, participan el Príncipe de Asturias (Alcalá de Henares), Puerta de Hierro (Majadahonda), Getafe, Fundación Alcorcón, Móstoles, Fuenlabrada, Severo Ochoa (Leganés), Infanta Sofía (San Sebastián de los Reyes), Henares (Coslada), Infanta Cristina (Parla), Villalba, Torrejón, Infanta Elena (Valdemoro), El Escorial, Rey Juan Carlos (Móstoles), Tajo (Aranjuez) y Sureste (Arganda del Rey), así como los centros privados HM Puerta del Sur (Móstoles), HM Sanchinarro (Madrid), HM Montepríncipe (Boadilla del Monte) y HM Torrelodones.
También se puede donar en el Centro de Transfusión, situado en el madrileño barrio de Valdebernardo, y en las unidades móviles de la Comunidad de Madrid y Cruz Roja. Los horarios y direcciones de los puntos fijos y móviles están disponibles para su consulta en www.madrid.org/donasangre.
Los requisitos mínimos para donar son tener entre 18 y 65 años, pesar más de 50 kilos y gozar de buena salud. El Centro de Transfusión de la Comunidad de Madrid distribuye al año 250.000 bolsas de sangre entre todos los hospitales de la región, cinco de ellos en la lista de los más grandes y complejos de la sanidad nacional.
Al año, en la región pueden llegar a transfundirse cerca de 38.000 unidades de sangre en cirugías, 42.000 para pacientes onco-hematológicos, 30.000 en Urgencias y 9.000 en intervenciones pediátricas. Dependiendo de la patología del paciente se le transfunden uno o más componentes sanguíneos, hematíes, plasma y plaquetas, por lo que una sola acción puede ayudar a mejorar o salvar la vida de hasta tres pacientes.
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