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Díaz Ayuso ha declarado que el primer piso público destinado al entrenamiento y la transición hacia la vida independiente para personas con autismo se inaugurará en 2025.

viernes 04 de octubre de 2024, 13:22h
Díaz Ayuso ha declarado que el primer piso público destinado al entrenamiento y la transición hacia la vida independiente para personas con autismo se inaugurará en 2025.
La presidenta de la Comunidad de Madrid ha declarado hoy que a mediados del próximo año se implementará un piso público. Este espacio estará destinado a la convivencia de personas con autismo, quienes estarán bajo la supervisión de profesionales. El objetivo es entrenar sus habilidades y, al mismo tiempo, facilitar una transición hacia una vida completamente independiente.

Durante una visita a la sede de la Fundación Juan XXIII, ubicada en el distrito de Vicálvaro de la capital, se ha explicado que Madrid es una región que ofrece atención gratuita y especializada a las personas con discapacidad. Esta entidad, que lleva más de 55 años siendo un referente en la inclusión sociolaboral de individuos en riesgo o en situación de vulnerabilidad psicosocial, cuenta con un equipo de 800 trabajadores y apoya a 4.000 beneficiarios directos.

Una inversión de 250.000 euros está prevista por el Ejecutivo autonómico para fomentar esta iniciativa. Gracias a este proyecto, se brindará la oportunidad a las personas con trastorno del espectro autista de trabajar en el desarrollo de sus habilidades y hábitos diarios durante varios meses, lo que les permitirá alcanzar una autonomía plena en el futuro.

La vivienda pública que se está desarrollando será un modelo a seguir en la región. Esta iniciativa se suma a otros proyectos, como el piso formativo de la Fundación Juan XXIII, donde se llevan a cabo talleres de cocina, limpieza y cuidado personal. Estos talleres sirven como un entrenamiento previo para que las personas con discapacidad intelectual puedan adquirir habilidades que les permitan ser autosuficientes en sus hogares. Además, la fundación gestiona cinco viviendas tuteladas o supervisadas.

La Comunidad de Madrid destina anualmente 6,5 millones de euros a esta entidad, que proporciona 289 plazas públicas en su centro ocupacional, así como en el Centro de Día y el centro de rehabilitación laboral. Además, una parte de estos recursos se utiliza para la formación para el empleo, empleo protegido, empleo con apoyo, y programas relacionados con el ocio, el deporte, y la vida autónoma. También se invierte en educación especial y aulas estables.

En este contexto, la Consejería de Educación, Ciencia y Universidades ha incrementado este año la capacidad del colegio de Educación Especial Juan XXIII-Buenafuente, añadiendo 12 nuevas plazas que se distribuyen en dos aulas adicionales. Este centro educativo, ubicado en el distrito de Chamartín de la capital, ya dispone de seis plazas para Infantil, 62 para ESO y 28 en talleres formativos.

El colegio se enfoca en la inclusión plena de todos los estudiantes, tanto en su interior como en el exterior. Esto se logra mediante diversas actividades, incluyendo la educación combinada, dado que cuenta con cinco aulas de educación especial situadas en colegios ordinarios autorizados.
Adicionalmente, se brindan actividades compartidas en varios centros ordinarios, así como prácticas laborales y cooperación con programas de formación que facilitan la inserción laboral a través del empleo.

Díaz Ayuso ha subrayado durante su visita varias iniciativas del Gobierno autonómico, entre las cuales se encuentra el nuevo registro de voluntades. Este registro permitirá a las personas con discapacidad y a sus familias expresar su plan de vida. El objetivo es que los padres no tengan que preocuparse por el futuro de sus seres queridos tras su fallecimiento, permitiéndoles así vivir con dignidad y plenitud.

En consonancia con esta iniciativa, la Comunidad de Madrid promoverá la creación de unidades específicas en las nuevas residencias para personas mayores. Estas unidades permitirán que los hijos con discapacidad vivan junto a sus padres, disfrutando de autonomía y atención personalizada, al mismo tiempo que podrán compartir momentos y espacios que fortalezcan su vínculo afectivo.

De igual manera, la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales dispondrá de su primera residencia pública destinada a personas con discapacidad intelectual que se encuentran en fase de envejecimiento prematuro. Esta residencia contará con un total de 70 plazas, organizadas en cinco unidades de convivencia. La ubicación elegida para este nuevo centro será las instalaciones de la antigua Residencia Fray Bernardino, situada en el distrito de Carabanchel, en la capital. Se prevé que estas instalaciones sean reformadas con una inversión aproximada de 11,5 millones durante el transcurso del año 2025.

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