Una semana después de aquella sesión plenaria el Alcalde, Vicente Martín Bravo, enviaba al doctor Pedro Antonio Cornago Fernández la nota que ilustra esta información para comunicarle el acuerdo adoptado por unanimidad y el cambio en
el callejero de Pozuelo.
No es posible precisar por qué durante décadas la calle Doctor Cornago se llamó Valdenovillos. Lo que está documentado es el motivo por el que dejó de utilizarse la acepción de probable origen ganadero.
El 13 de noviembre de 1959 la calle que comenzaba en la plaza del Rey y terminaba en el Camino de las Huertas fue rebautizada con el nombre de quien durante tres décadas y media fue mucho más que un médico de pueblo. El doctor Cornago murió un mes y medio después de que se le concediera tan noble distinción.
El que también fuera Alcalde en la posguerra nos dejó sabiendo que la cuesta sin asfaltar que nacía a escasos pasos de su hogar llevaría su nombre. El reconocimiento le llegó cuando se le apagaba la vida. Una salpicada de milagros. Porque no hay mayor milagro que nacer y Don Pedro trajo al mundo a varias generaciones de pozueleros.
Hoy Doctor Cornago es uno de los centros neurálgicos de las Fiestas Patronales al discurrir por su tramo final los encierros de las Fiestas Patronales en honor de la Virgen de la Consolación. Y la carrera de Autos-Locos.
Si (
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