Nombres como Valeria Castro o Sabrina Carmona, entre otros muchos, resuenan con fuerza dentro de la comunidad gamer y demuestran que este mundo no entiende de diferencias de género. Y, además, la propia industria se esfuerza por visibilizar a las mujeres, como vamos a ver a continuación.
Una industria cada vez más comprometida con la igualdad de oportunidades laborales
En sus inicios, la industria de los videojuegos parecía no llevarse demasiado bien con la mujer. Los videojuegos eran cosa de chicos, especialmente de los más nerds. Pero, afortunadamente, las cosas han cambiado mucho y ahora son cada vez más las mujeres no solo jugonas, sino protagonistas dentro de las empresas de videojuegos.
Este cambio se debe en buena medida a la apuesta decidida de los grandes nombres de la industria, como Microsoft o GameSpot, por políticas firmes de igualdad de oportunidades laborales para que las mujeres se sientan en igualdad de condiciones con los hombres.
Por ello, puede ser interesante como mujer respaldar a estas empresas incluso invirtiendo en ellas, algo muy accesible hoy en día. Por ejemplo, comprar acciones GameStop es cuestión de unos pocos clics, tras ver los gráficos de la cotización e informarte de los entresijos de la compañía.
Una revolución muy necesaria para una industria moderna
¿Quién no recuerda la hipersexualización de los pocos personajes femeninos protagonistas de videojuegos hace unas décadas, como Lara Croft de Tomb Raider? ¿O cómo no caer en la cuenta del significado del nombre de la videoconsola Game Boy? ¿O el lanzamiento de consolas de color rosa para tratar de llegar supuestamente al público femenino?
Todas estas cuestiones están siendo deconstruidas por la presencia de mujeres en la industria, que demandan cambios que se alejen de clichés y estereotipos caducos. Las mujeres amantes de la industria de los videojuegos reclaman hoy diversidad en la manera en las que se las representa.
Uno de los catalizadores: los estudios de desarrollo indie
Desafortunadamente, en demasiadas ocasiones, los estudios de desarrollo de los títulos triple A son conservadores a la hora de innovar en la representación de la mujer en sus videojuegos. Pero, en cambio, los estudios de desarrollo indie gozan de mucha más libertad para cuestionar cánones preestablecidos. Destaca, por ejemplo, el caso de Talara, título argentino desarrollado en su totalidad por mujeres.
En resumidas cuentas, las mujeres reclaman su merecido y justo puesto en la industria del videojuego del s. XXI. Libre de estereotipos y paternalismos, para que puedan surgir nuevas ideas que hagan que los videojuegos sean más diversos e innovadores que nunca. Los prejuicios van cayendo poco a poco y cada vez son más las mujeres que disfrutan de los videojuegos tanto como los hombres. Sin duda, una buena noticia que beneficia, en última instancia, a todos los gamers.
Si (
No(