Al tratarse de una solución integral, estos centros ofrecen una amplia gama de servicios que comprende desde la desintoxicación por vías médicas hasta la terapia psicológica, el apoyo emocional y los programas de rehabilitación personalizados.
Algunos, como el centro de desintoxicación de adicciones ALFI (en Madrid), ofrecen una primera consulta gratuita y opciones más flexibles como la terapia online para aquellos que todavía dudan en si deberían dar el paso. De esta manera, es posible comenzar con un tratamiento efectivo y personalizado que se adapte a las necesidades de los pacientes y les facilite dar el paso a tratar su adicción.
Aún así, para muchas personas que se encuentran en esta situación, lo más complicado puede ser aprender a identificar cuándo realmente necesitan acudir a un centro de desintoxicación. Para ayudar a tomar la decisiones a las personas que se encuentran en esta situación, en este artículo analizaremos cuáles pueden ser las señales de alerta.
Señales de alerta: ¿cómo pueden ayudarte a saber si necesitas acudir a un centro de desintoxicación?
Identificar y reconocer la necesidad de acudir a un centro de desintoxicación puede ser complicado, tanto para la persona que padece la adicción como para sus familiares. Sin embargo, es crucial saber cómo hacerlo para poner una solución a tiempo y que el individuo pueda volver a tener una vida libre, plena, saludable y tranquila.
Para ello, existen varias señales de alerta que pueden ser de gran utilidad a la hora de identificar la necesidad de acudir a un equipo de especialistas. Estas pueden ser:
1. Dependencia física y síntomas de abstinencia
Una de las señales más evidentes de que se necesita ayuda profesional para tratar una adicción es la dependencia física, ya sea a una sustancia o a una actividad (como el juego, las compras compulsivas o el sexo).
Esta dependencia suele manifestarse cuando el cuerpo se ha acostumbrado tanto a estos estímulos adictivos que experimenta síntomas de abstinencia. Algunos de estos síntomas pueden ser los temblores, la sudoración excesiva, las náuseas, la ansiedad y, en los casos más graves, vómitos y convulsiones.
Si una persona experimenta estos síntomas, es una señal clara de que debe buscar ayuda médica y psicológica de inmediato.
2. Pérdida de control sobre el consumo
Otro indicador muy significativo es el control sobre el consumo de las sustancias o sobre la situación que esté generando la adicción. En estos casos, la persona acaba consumiendo más de lo que planeaba y no es capaz de reducir el consumo o la actividad compulsiva a pesar de intentarlo por métodos propios.
Además, en estos casos, las personas suelen dedicar gran parte de su tiempo a planear, obtener, consumir y recuperarse del uso de una sustancia o actividad. Esta falta de control puede llegar a tener consecuencias devastadoras en la vida del individuo, por lo que debe contactar con un centro de desintoxicación en cuanto se experimenta por primera vez.
3. Problemas de salud mental
A menudo, las adicciones vienen acompañadas de problemas de salud mental como los trastornos del sueño, la depresión, la ansiedad o los cambios de humor extremos. Por lo tanto, si una persona advierte que su salud mental se deteriora a medida que aumenta su adicción a una sustancia o actividad debería tomarlo como una señal de que necesita ayuda profesional.
En la mayoría de los casos, para lograr una recuperación plena y exitosa, es necesario combinar el tratamiento de la adicción con la terapia y el cuidado de la salud mental. Estos tratamientos pueden realizarse de manera simultánea y coordinada dentro del mismo centro de desintoxicación.
4. Deterioro de las relaciones personales
Las adicciones, sean del tipo que sean, pueden provocar daños significativos en las relaciones personales, profesionales y familiares. Algunos de los comportamientos más comunes que pueden producir estos daños son las mentiras, el incumplimiento de las responsabilidades, el comportamiento errático y el aislamiento social.
Estas conductas derivadas de las adicciones pueden provocar conflictos constantes con familiares y seres queridos. Al detectar este tipo de enfrentamientos, podemos reconocerlo como un claro indicativo de que se necesita ayuda profesional.
5. Impacto en la actividad diaria
Cuando el consumo de sustancias o la adicción a ciertas conductas interfiere en la capacidad para cumplir con responsabilidades diarias, nos encontramos ante otra señal de alerta de que debemos acudir a un centro especializado en desintoxicación.
El trabajo, los estudios, las responsabilidades familiares o las tareas domésticas son algunas de las actividades que se pueden ver afectadas por las conductas adictivas. Además, cometer alguna negligencia en estas áreas puede conllevar la pérdida del trabajo, problemas financieros o dificultades académicas.
6. Conductas peligrosas
Las adicciones afectan a la actividad cerebral y, por lo tanto, pueden alterar la racionalidad de una persona y llevarla a cometer comportamientos peligrosos como conducir bajo la influencia de sustancias, participar en actividades ilegales o tomar decisiones impulsivas que puedan poner en riesgo la vida propia y ajena.
Este tipo de conductas no sólo son muy peligrosas, sino que también ponen en evidencia el nivel de dependencia de la persona, indicando que requiere de intervención profesional.