"La concejala de Familia sigue sin dar la cara". UGT ha denunciado la existencia de riesgos psicosociales en dicha Concejalía; "estos riesgos hacen que ir a trabajar sea nocivo para la salud". Reproducimos de forma íntegra la respuesta de UGT a la contestación dada por el Ayuntamiento de Pozuelo.
Las propuestas de medidas conciliadoras, que contribuyan a disminuir dichos riesgos, son desoídas por los políticos del Gobierno municipal sin razonamiento alguno. El concejal de Recursos Humanos, Diego de Arístegui, minimiza la importancia del estudio al decir que “tan sólo identifica factores de riesgo” ignorando un grave problema del personal de la Concejalía de Pérez Abraham.
Señala de Arístegui que el estudio “establece medidas de mejora” pero realmente no establece medidas sino que las recomienda; es al equipo de Gobierno y en especial a la invisible concejala de Familia a quien le corresponde adoptarlas y aplicarlas, lo que no hace, de ahí nuestra reivindicación. En todo caso, tampoco es cierto que se hayan puesto en marcha medidas de índole formativo u organizativo, pues de ser así acreditaría su existencia y no lo ha hecho.
Es importante recordar al concejal de RRHH que la representación sindical lleva años solicitando el protocolo de acoso y que si se prestaron a abordar su elaboración fue sólo porque lo ordenó un Inspector de Trabajo debido a la denuncia de otro trabajador municipal que, finalmente, ha tenido que recurrir a la vía judicial para que su denuncia de acoso tenga algún efecto.
Si el personal de Familia no utilizó el procedimiento de acoso, fue porque confiaba en que, con el estudio de riesgos psicosociales sobre la mesa, se adoptarían medidas que harían innecesarias las denuncias por acoso; exceso de confianza, pues la concejala Pérez Abraham, no tuvo reparo alguno en advertir al personal de Familia, cuando expuso los resultados del estudio: “ya tengo las firmas de los trabajadores que habéis solicitado el estudio”, -lo que entendemos fue una amenaza directa a los 27 trabajadores de los 34 que formularon la solicitud-, todo ello ante la mirada atónica de Diego de Arístegui.
Ante la falta de efectividad del estudio, el personal deberá considerar un replanteamiento con respecto a las denuncias por acoso. Lo que queda de manifiesto por parte de Pérez Abraham y de la alcaldesa es que el personal de esta Concejalía les importa poco o nada.