En diciembre de 2019 el SARS-CoV-2 apareció en Wuhan y en tres meses puso en peligro al mundo entero. Con el fin de contener una infección colectiva, el 14 / marzo / 2020 el Gobierno de España, con la aprobación del parlamento, decretó el estado de alarma y el comienzo del confinamiento, durando tres meses, países como Senegal, con experiencia en pandemias, decretó el toque de queda con tan solo cinco casos diagnosticados. Junto a la terrible crisis social y sanitaria, el virus COVID-19 estremeció las bases de la economía mundial. El desplome de las bolsas fue global en los primeros meses de la pandemia. Sin embargo, uno de los primeros sectores en recobrar una senda positiva fue el tecnológico demostrando así su posición preponderante como imprescindible propensión de futuro, llamada a transformar los patrones de comportamiento y las pautas de consumo en el planeta. El sector tecnológico está en constante evolución. Los avances hacen prever que en las próximas décadas aún será más relevante a todos los niveles y en todos los órdenes de vida. Por tanto, es un modelo de inversión con una gran proyección futura.
Pese a lo que pudiera parecer, y habiendo generado, proporcionalmente, las mayores rentabilidades, tanto los gigantes tecnológicos, como pequeñas compañias, una inversión con éxito en tecnología no es sencilla, depende de muchos elementos para lograr el éxito. Es una inversión compleja en renta variable, y que previamente merece la pena estudiar a fondo antes de incluirla en una cartera diversificada de inversiones. Invertir en tecnología participa de uno de los sectores clave en las inversiones. Se considera un sector muy importante a la hora de incluir en la diversificación de una cartera de inversiones. Conocemos más sobre la inversión en tecnología, motivos para invertir, herramientas de inversión, etc.
Existen diversas herramientas de inversión en empresas tecnológicas. Las más habituales son las siguientes:
Invertir en ETFs: Fondos de gestión pasiva con característica de inversión colectiva en acciones de participación en fondos vinculados a la tecnología y que pueden comprarse y venderse a lo largo del día en la bolsa, de la misma manera que se negocian las acciones ordinarias. Son inversiones domiciliadas en los mercados europeos que están sujetos a la regulación en el marco de fondos mutuos transfronterizos en los países miembros de la UE. (UCITS).
Presentan la ventaja de tener menores costes en camisones que los fondos de gestión activa.
Fondos de gestión activa: Permiten movimientos rápidos adaptativos mejor a la evolución del mercado. Son la opción más utilizada en la inversión a largo plazo sobre tecnológicas pese a tener un mayor importe las comisiones de los operadores.
Productos financieros derivados: Han cobrado gran relevancia a raíz de la pandemia en cuanto a oferta y demanda. Su valor deriva de la evolución de los precios de otro activo, denominado “activo subyacente” que puede ser muy variado: acciones de empresas tecnológicas, materias primas, tipos de interés…, permitiendo así invertir sobre un activo sin comprarlo, especulando sobre su valor a favor o en contra. Es un modelo muy complejo de inversión y poco recomendable para inversores sin experiencia.
Cotización de empresas tecnológicas
Las acciones tecnológicas son las que más están subiendo en bolsa debido a que las grandes tecnológicas americanas son las compañías que más se están diversificando en otros sectores diferentes, y participan en la compra de Semiconductores (motor de la inteligencia artificial). Dentro del mercado español –Ibex 35- las empresas tecnológicas con futuro más favorable se encuentran: AMPER, GRUPO EZENTIS SA, INDRA, JAZZTEL, MÓVILES, TECNOCOM TEL ENERG, TELEFÓNICA. Cabe mencionar que dentro de los departamentos de desarrollo Software de las empresas cotizantes, se está implementando sistemas de encriptación, garantizando así la seguridad del dinero, para diferentes casas de apuestas. La opinión y reseña de Betsson casino te podrá guiar en este nuevo mundo tecnológico donde encontrarás información de calidad.
¿Invertir en nuevas tecnologías?
Formar una cartera de valores incluyendo activos procedentes del sector tecnológico, en estos momentos, y con objetivos de rentabilidad a medio y largo plazo, cuando la tendencia haya desplegado todo su potencial, es una de las opciones de inversión más interesantes.
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