La Comunidad de Madrid ha enfatizado la importancia de extremar las precauciones y supervisar a los menores en piscinas y zonas de baño durante la temporada estival. Este llamado busca prevenir accidentes que, lamentablemente, pueden ocurrir en estos espacios recreativos. El Gobierno regional se encarga de evaluar las condiciones higiénico-sanitarias de las instalaciones acuáticas registradas por la Administración autonómica.
Recomendaciones para una mayor seguridad
Entre las directrices proporcionadas por la Consejería de Sanidad, se destaca la necesidad de evitar juegos peligrosos como empujones o carreras cerca de las áreas de baño. También es fundamental seleccionar el tamaño y profundidad adecuados de las piscinas según la edad del usuario. Además, se subraya que la mejor forma de prevenir ahogamientos es no permitir que los menores se bañen solos si no tienen experiencia suficiente.
En caso de emergencias, es crucial contactar al 112 para alertar al Servicio Autonómico de Urgencia Médica (SUMMA 112). Los profesionales del centro coordinador ofrecen orientación telefónica mientras se desplaza un recurso asistencial. El año pasado, el SUMMA 112 llevó a cabo 37 intervenciones relacionadas con ahogamientos, lo que representa una disminución respecto al año anterior.
Vigilancia constante y precauciones adicionales
Las autoridades madrileñas insisten en que la vigilancia sobre los niños debe ser continua, ya que un menor puede estar en grave peligro incluso en solo 10 centímetros de agua en cuestión de segundos. Por ello, siempre deben estar acompañados por un adulto responsable, independientemente de la presencia de socorristas.
Asimismo, es esencial tener cuidado con los dispositivos flotantes; estos deben ser homologados y apropiados para la edad y tamaño del niño. Aunque pueden ofrecer una falsa sensación de seguridad, su uso incorrecto puede resultar en accidentes fatales.
Consejos prácticos para disfrutar del agua
Los expertos recomiendan evitar lanzarse al agua sin conocer el fondo y recalcan los riesgos asociados a esta práctica. En áreas naturales, es vital aumentar la vigilancia tanto para adultos como para niños. También se aconseja evitar cambios bruscos de temperatura al entrar al agua y respetar los tiempos de digestión antes de nadar.
No se debe ingresar al agua tras realizar ejercicio intenso, bajo efectos del alcohol o después de haber estado expuesto al sol durante mucho tiempo. Es importante protegerse adecuadamente del sol, especialmente los menores, así como mantenerse hidratado y moderar el consumo de alcohol.
Control sanitario en instalaciones acuáticas
La Dirección General de Salud Pública realiza un seguimiento riguroso durante el verano sobre las condiciones sanitarias en las 1.358 piscinas registradas en la región. Esta labor incluye inspecciones y análisis del agua, colaborando con municipios que carecen de recursos suficientes para llevar a cabo estos controles.
Todas las instalaciones acuáticas públicas y privadas deben contar con un servicio de socorrista conforme a la legislación vigente. Además, aquellos espacios recreativos acuáticos que superen los 500 metros cuadrados deben tener un enfermero o médico presente para garantizar la seguridad sanitaria.
La noticia en cifras
Cifra |
Descripción |
37 |
Intervenciones del SUMMA 112 el año pasado por episodios relacionados con ahogamientos. |
11 |
Reducción en el número de intervenciones respecto a 2023. |
1,358 |
Número total de piscinas censadas en la Comunidad de Madrid. |