Cabe recordar que este cambio horario es parte de la directiva europea 2000/84/CE, que afecta a todos los Estados miembros de la Unión Europea y que pretende aprovechar mejor las horas de luz solar y consumir menos electricidad.
Dos veces por año
Este "ritual" se sucede dos veces al año: el último domingo de marzo y el último de octubre. Para determinar el momento de los cambios horarios, se tuvo en cuenta el hecho de que en España existen dos horas oficiales, una para la Península y el archipiélago balear y otra para Canarias, que va una hora por detrás desde 1922.
Este cambio se aplicó por primera vez durante la I Guerra Mundial para mantener abiertas las fábricas una hora más. De hecho, uno de los argumentos que defienden este adelanto horario es el beneficio para el comercio.
En concreto fue en el año 1943 cuando España decidió adelantar los relojes 60 minutos. Algunos expertos aseguran que aquel “gran error histórico” explica que en la Península se coma y se cene más tarde que en el resto de Europa.