Los controles tienen como objetivo velar por la seguridad vial de los alumnos, comprobando tanto la documentación del vehículo como la del conductor y las características de seguridad del propio autocar. Entre los documentos cuya obtención y vigencia se supervisa se encuentran la autorización especial para el transporte escolar, el seguro de responsabilidad civil ilimitada, la señal indicativa del transporte escolar así como las especiales autorizaciones a que queda sujeto este tipo de transporte tanto para el vehículo como para el conductor.
Los agentes revisarán los controles de forma que perturben lo menos posible la llegada de los alumnos a los colegios bien al inicio o al término de la ruta, y comprobarán además que los autobuses y autocares se detienen en sus diferentes paradas en los lugares establecidos a tal fin.
En aquellos casos en los que se identifiquen infracciones que pudieran poner en peligro la seguridad de los escolares será sustituido inmediatamente el vehículo por otro que se encuentre en perfectas condiciones y se procederá a realizar las correspondientes denuncias.
La campaña se está llevando a cabo de forma intensiva durante las primeras semanas de este curso 2010-2011 y posteriormente se mantendrán controles rutinarios a autobuses y autocares con el fin de asegurar la normalidad en el servicio durante todo el periodo académico.
Durante el curso pasado, 2009-2010, fueron impuestas 231 denuncias por irregularidades detectadas durante los controles que Policía Municipal llevó a cabo a cerca de 400 vehículos destinados al transporte escolar y de menores.
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