Con esta iniciativa, organizada por el Ayuntamiento en colaboración con la Comunidad de Madrid, se pretende dinamizar las zonas comerciales de Pozuelo, como ya se hizo el año pasado con el barrio de la Estación. Además, gracias a esta feria, se han dado a conocer productos que recuperan el valor del oficio artesano como las piezas de cerámica esmaltada o la bisutería, los bolsos y complementos en piel o las velas. Del total de participantes de esta edición nueve eran de Pozuelo.
Las oferta comercial se completó con un taller infantil de títeres y dos castillos hinchables. Además la Big Band de la Escuela Municipal de Música y Danza ofreció un concierto al aire libre. Y el tiempo acompañó.