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Sandy y Doney encaramados en la grúa de Pozuelo de Alarcón

jueves 04 de marzo de 2010, 09:04h

El tercer trabajador de la empresa Jigar, Doney, se subió a las cuatro de esta madrugada a la grúa de 40 metros ubicada en las obras de la Plaza del Padre Vallet, para hacer compañía a Sandy.

Doney lleva trabajando para Jigar siete años y  tiene tres hijos (de 9, 11 y 12 años). Ha subido para hacer compañía a Sandy y para pedir una solución. En declaraciones a Europa Press relata que "es muy duro estar en esta situación, pero aguantaré como ha hecho mi compañero. Desde aquí arriba da mucha impresión. Además, hace mucho viento y mucho frío". "No es justo que se trabaje tanto y que por culpa del impago tenga que cerrar una empresa. Tal y como están las cosas, si nos quedamos sin trabajo a ver qué hacemos", afirmó.   

Según declaraciones de David Cediel, primer trabajador de Jigar que se subió a la grúa y bajó el 17 de febrero para asistir al nacimiento de su segundo hijo, "Sandy estaba ya un poco flojo, pero ahora, al ver que su compañero ha subido, dice que ya no se baja",  Ayer tuvo una reunión en el Ayuntamiento de la que sólo sacó en claro que hay que continuar. "Nos dicen que no pueden hacer nada, que están atados de pies y manos", explica.

Tras la infructuosa reunión, los trabajadores de Jígar S.A. decidieron que había que seguir forzando la máquina y esta madrugada, sobre las 4.00 horas, cinco trabajadores de la empresa ayudaron a Doney a saltar la valla de la obra y burlar la seguridad (Policía Municipal, Policía Nacional y vigilantes de empresas privadas).

"Cuando se han querido dar cuenta ya estaba por la mitad de la grúa. Después de todo lo que hemos hecho ya no podemos rendirnos", explica David, que dice que no ha podido pegar ojo en toda la noche "sabiendo que iba a subir".

Por su parte, Sandy aseguró que seguirá en la grúa hasta que se solucione la situación. "Estamos esperando órdenes para bajarnos. Estamos esperando una pronta solución. Puede ser inminente. Espero que así sea para irme a casa con mis hijas", dijo.   

Sandy indicó que en lo alto de la grúa está pasando "calamidades". "Estoy aguantando como los valientes. Hay que aguantar como sea y tratar que empresarios así no sigan estafando a empresas pequeñas".   

Según el trabajador dominicano, el Ayuntamiento de Pozuelo abonó a Ploder Uicesa más de tres millones de euros por la obra pero Jigar, que "es la segunda subcontrata" de la obra aún "no ha cobrado". "A Ploder Uicesa el alcalde le ha pagado tres millones de euros. ¿Dónde está ese dinero? El alcalde debe hacer las gestiones necesarias para que la empresa constructora cumpla con la subcontrata. La obra está al 80 por ciento de terminación y no se ha cobrado", concluyó.

Los manifestantes, concentrados una tarde más en la plaza para apoyar a los dos trabajadores subidos en la grúa, increparon a unos empleados de la empresa Ploder Uicesa que estaban dentro del recinto de las obras.

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